¡Buenas! Hoy os traigo la reseña de la tercera parte de la saga Los Legados de Lorien de Pittacus Lore. Os aviso, que si no habéis leído los dos anteriores libros esta reseña puede contener spoilers de ellos.
Lee las reseñas de los demás libros de la saga:
- Título: El ascenso de nueve
- Saga: Los legados de Lorien
- Autor: Pittacus Lore
- Editorial: Molino
- Páginas: 368 págs
- Precio: 17,99€
Hasta el día en que conocí a John Smith, el Número Cuatro, había estado huyendo sola, escondiéndome y luchando para permanecer viva.
Juntos, somos mucho más poderosos; pero solo duró hasta que tuvimos que separarnos para encontrar a los otros...
Fui a España para encontrar a Siete, y encontré aún más, incluyendo al décimo miembro de la garde que escapó con vida de Lorien. Ella es más pequeña que el resto de nosotros, pero es igual de valiente. Ahora estamos buscando a los otros...
Incluyendo a John.
Pero ellos también.
"Quieren terminar lo que empezaron. Pero tendrán que luchar con nosotros primero."
Esta tercera entrega esta repleta de acción y aventura, a diferencia de las dos primeras las cuales eran mucho más introductorias y nos contaban un poco más del pasado de los personajes que salían y acerca de su mundo, Lorien.
En esta parte, Seis y Cuatro siguen separados, tal y como terminaron en la segunda entrega. Cada uno se ha reencontrado con otros números. Por su parte, Cuatro ahora va con Nueve, un chico fuerte, algo chulo y muy orgulloso de sí mismo, el cual me parece que va a romper algún que otro corazón en las siguientes entregas. Seis, en cambio, sigue con Marina y Ella, las cuales encontró en España, junto con Crayton el cepan de Ella. Ellos cuatro, descubrirán un nuevo número en la India y no dudarán ni un segundo en ir hacía ahí para encontrarse con él, y es número Ocho, el cual es considerado un Dios en sus tierras, gracias a sus poderes.
Como en cada libro, nos encontramos con muertes, no solo por parte de los mogos, sino también por parte de personas de Lorien. Lo cual me hace pensar un poco, porque al final los chicos que viajaron a la Tierra se están quedando sin ningún cepan y la verdad no entiendo porque los autores están haciendo que un grupo de jóvenes se queden luchando ante muchos malos e intentando proteger sus cofres y la Tierra. Estaría bien que al menos algún cepan estuviera con ellos, ya que ellos son los que saben más acerca de su mundo y les pueden ayudar en muchas cosas.
Igual que en los anteriores libros, este también esta contado en primera persona a partir de diferentes personajes principales, por lo cual podemos conocer un poco mejor de cada uno, sobretodo los pensamientos y sentimientos que sienten en cada momento.
Una de las mejores cosas de este libro, es que no se han centrado tanto en Sarah, ya que no me caía muy bien después de lo que le hizo a John en la segunda parte cuando lo entrego a la FBI. Pero, como era de esperar al final las cosas no eran como John creía.
Lo que más he echado en falta, es que hubiese un poco más de protagonismo para Marina, la número siete, ya que en el anterior libro paso a ser mi preferida. Desde mi punto de vista la han dejado un poco apartada de algunas tramas, y se le ha dado mucho protagonismo a John, a Nueve y a Seis, quizás también porque son los más fuertes y en las peleas eran los que más luchaban, pero deberían de haber hecho algo para que Marina pudiese formar parte de todo esto también.
Por otro lado, también he echado en falta un poco de trama amorosa y de drama entre los chicos, que al fin y al cabo son adolescentes y ya sabéis que me gustan mucho estas cositas.
Al terminar el libro, me he quedado con las ganas de leer más, ya que ha medida que he ido leyendo el libro, me he ido dando cuenta que todo esto tan sólo es el principio de la futura guerra que va a suceder entre los mogadorianos y los chicos de Lorien. Sólo espero que la cosa salga bien y haya pocos heridos.
¡Saludos, Loriens!
No hay comentarios:
Publicar un comentario